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Si vosotros no ardéis de amor, habrá mucha gente que morirá de frío.

sábado, 10 de diciembre de 2011

Mi ilusión empieza y acaba contigo.

Me gusta quererte, mirarte y poder perderme en tu mirada. Me gusta saber que estas ahí cuando no soy capaz de ver nada, y dormirme escuchando tu respiración, eso si que me gusta. Como también me gusta que seas tú ese único motivo que me impulsa día a día, y como también lo hace que tenga el lujo de compartir estos meses contigo. Me gusta, me encanta abrazarte y sentir que todo sobra, soñar cada noche contigo, saber que te preocupas por mi. Me gusta que me digas que me quieres, pero más me gusta aún que sepas que te querré para siempre. Y que el último buenas noches de cada día sea el pronunciado por tu voz, eso es lo que posiblemente más me guste de todo esto. Me gusta que seas tú y no cualquier otro, que sonrias cada vez que me ves, que lo des todo por mi. Me gusta que me digas lo guapa que estoy, aunque me mientas en bastantes ocasiones, pero me gusta. Y también me gusta que fijes tu atención en mi, que tus ojos reluzcan por la noche y sea lo único que llegue a ver en la oscuridad. Me gusta, me encanta, me vuelve loca, me pirra cada momento que pasas a mi lado, cada vez que te ries y no puedes parar de hacerlo, cada vez que me pides perdón y estas realmente arrepentido, cada vez que te inundan los nervios, o la rabia, cada vez que te duermes al teléfono, cada parrafada que me sueltas que hace que yo sea más tuya que mía, cada mirada de esas que lo dicen todo. ¿Y sabes porqué me gusta todo esto? Fácil, porque eres tú, porque tú eres todo lo que tengo, y lo que quiero tener hasta el fin de mis días.

miércoles, 23 de noviembre de 2011

Mejor que el cielo, infinitamente mejor.


Con frecuencia me pregunto si es el karma el que me ha dado todo esto, me pregunto el porqué la vida me guiña un ojo de sopetón, sin condiciones ni trucos de por medio. Cuestiono que es lo que tengo yo que no tiene otra persona, lo que tengo que me ha llevado a ser considerablemente feliz, a sentir que mi buena suerte se alza por encima de la de cualquier otro mortal. Y es que en eso se ciñe todo, en que tan solo somos personas, personas extremistas y a momentos complejas que tratan de subsistir en una vida demasiado ajetreada. Buscando eso que consigue hacerlo todo fácil, eso que complementa a una hasta el punto de la saciedad. Qué es aquello que estoy pasando por alto que me ha brindado la sonrisa que me hace sentirme viva hoy por hoy, cual es el número exacto de buenas acciones que he desempeñado a lo largo de los catorce años en los que he tenido el privilegio de encontrarme. Siento que todo lo que conozco por ahora se aferra a mil y una dudas, a cientos de porqués sin responder, sin hallar ninguna respuesta coherente. Que nada de esto en lo que vivimos es perfecto, pero, poder compartir con lo que dispones con la persona a la que amas, es mejor que alcanzar la perfección. Poder sentir que las nubes se quedan no solo para alcanzar a tocar con los dedos de una mano, si no para sentirlas bajo los pies, es mejor que todo el oro del mundo. Que sentirte realmente colgada de una mirada que te arranca una sonrisa idiota durante horas y horas, es muy, pero que muy, muy muy superior a todo lo imaginable. Y es que es actualmente cuando siento que no necesito nada más que se salga de su nombre y sus apellidos, de sus ojos oscuros, de su pelo corto, de sus lunares, de su piel morena, de sus sonrisas, de sus labios, de sus te quieros, de sus noches, de sus mañanas y de sus tardes, de sus sueños, de su futuro, de su voz, de su risa, de su presente. Es en este día, en el que soy capaz de decir que he comprendido el verdadero significado de un verbo, tanto complejo como simple. Sí, como no, estoy hablando del verbo "amar".

viernes, 11 de noviembre de 2011

Eres la razón de mis sentimientos

Conozco demasiado bien el compás que sigue tu respiración cuando te duermes, o cuando estás a dos minutos de hacerlo. Conozco tus miedos y todas tus inquietudes. También sé al dedillo tu peor pesadilla, al igual que me he aprendido tus mayores sueños. Sé que película consigue tocarte ese punto débil que todos tenemos, domino tu nombre y tus apellidos completos, y conozco cual es el viaje de tu vida. Sé que odias determinada música, a determinadas personas, y determinada forma de vida. Como también conozco que te priva tocar la guitarra, y sé que sabes que me siento muy afortunada de haberte escuchado hacerlo. Sé que asignaturas se te dan fatal, pero también podría nombrar aquellas en las que destacas. Domino lo que te molesta, sí, odias que te pasen la mano por la cabeza. También conozco esa bocecilla tan graciosa que se te pone cuando te despierto y no se puede determinar si estás más aquí que allá. Además, no peco de ignorancia en cuanto a tu forma de preocuparte por cualquier cosa que me ocurra. Sé que no aguantas más de dos minutos sin hablarme cuando te enfadas (aunque en el fondo sé que nunca lo haces de verdad), y también sé que eres incapaz de no molestarte por cada una de las cosas en las que no te hago demasiado caso. Conozco tus rabietas, y la forma en la que miras, sí, esa forma capaz de alegrarme el día. Me sé al dedillo cada una de tus virtudes, al igual que hasta el más mínimo trapo sucio. Sé que lo te molesta que te diga, y de quien no aguantas que te hable; podría decir que tengo la capacidad de ponerte nervioso cuando yo quiero. También sé en todo aquello en lo que crees, y todo eso que te paraliza del miedo. Conozco cada una de las tácticas que utilizas para salirte con la tuya, y también me he dado cuenta de que me conoces como nunca nadie lo había hecho. Sé que no te gusta seguirme el juego, y que te percatas al momento de que me hago la tonta para que acabes cada una de las frases que no terminas. Sé que te gusta mentirme demasiado, aunque eso sea lo de menos, sé que eres capaz de pasarte absolutamente toda la noche hablando por teléfono sin que halla un minuto en el que disminuya la conversación. Conozco tu forma de preguntarme si me pasa algo, o de pedirme perdón cuando hago que me enfado contigo, como también conozco tu sonrisa, y todo lo que llegas a representar con ella. Sé que es aquello que te avergüenza, como por el contrario también estoy al tanto de aquello que te crece. Además de todo esto, conozco los motivos por los que te castigan, o te premian, y esa forma de ser que te hace ser tú. No peco de ignorante en cuanto a cual es tu canción, animal, número, cosa, grupo y color favoritos, sé que tienes planes para el futuro, y conozco que sabes que soy tremendamente celosa, pero también sé que tú no te quedas corto. Me he memorizado el timbre de tu risa en todos los formatos, tanto el que usas cuando algo te ha hecho reír verdaderamente, como el que utilizas como vía de escape simplemente por cumplir.
-Sé la forma en la que te he alegrado el día hoy, en la que te alegraré mañana, y en la que seguiré haciéndolo todos los días de tu vida.

domingo, 6 de noviembre de 2011

Sabe perfectamente como hacerme feliz'3



Está lloviendo, quizás llueva demasiado, por lo menos, sí para mi gusto. Siempre he odiado la lluvia, la odio porque me encrespa el pelo, porque se enreda entre mi ropa, la odio porque simplemente es lluvia, y la lluvia siempre está presente en la típica escena de película americana en la que el protagonista se siente una mierda. Y, yo no quiero lluvia, ni frío, ni nieve, ni invierno, cosas que también odio desde que tengo uso de razón, porque, en mi vida no hay hueco para eso, sobre todo para que llueva, para finales tristes, para paseos a la luz de la luna en soledad mientras se te escapa una lagrimilla, no, para nada. Yo no quiero despertares oscuros en los que su sonrisa no sea la primera cosa que me venga a la cabeza, ni pasarme las tardes frías y grises pegada al televisor viendo cualquiera de esas películas en las que te muestran una vida desdichada que acaba aún peor que como empezó. Y no es que me proclame ignorante, no del todo, se que en todo lo bueno hay algo malo, y que en todo lo malo, hay algo aún peor, pero, es que he aprendido ha recoger tan solo eso que es perfecto, que supera lo bueno, que no tiene ni el mínimo detalle por el que sentirme molesta. Esta lloviendo, quizás llueva demasiado, puedo ver como las gotitas juegan a hacer carreras tras mi cristal, que diversión, que vicio.

lunes, 24 de octubre de 2011

Tu corazón contra mi oído.



Ya no me sale ser realmente coherente, ni poner otra cara que no sea la de gilipollas enamorada cuando estás cerca de mí, siquiera me sale soltar una frase completa sin mirar al suelo o sin revolotear por el ambiente hasta llegar a tu mirada, no. Pero que difícil se hace no resultar estúpida cuando te pasa lo que me pasa a mí, cuando te enamoras de verdad, hasta el último milímetro de hueso que te queda en el cuerpo. Y en ese momento, se te vuelven los ojos de color violeta, y la voz de un dulce parecido al de las galletas navideñas que prepara la abuela. Por no hablar de las manos, tan inestables y delicadas como una muñequita de porcelana. Se te pinta el alma de color arcoiris, y, por muy estúpido que resulte; tu mente se nubla, impidiéndote pensar, actuar con decisión, o ser normal. Impidiéndote hacer todo aquello que no te haría quedar mal ante esa persona. Y esto es lo que pasa, que cuando lo veo me muero, que me suben esas miles de mariposas de las que hablan una y otra vez en las películas de adolescentes, las cuales siempre creía otra de esas fantasías más; tales como la magia, como el amor a primera vista, o como los unicornios, pero que hoy, tengo toda la seguridad al decir que, pasan los días dormiditas, hasta que aparece su sonrisa, y bueno, ¿cómo van a tener los ojos cerrados si eres tú quien está caminando tan cerca, sobre el asfalto?

viernes, 30 de septiembre de 2011

Y te amo, por siempre.


Y sentirse la persona más afortunada que pisa el planeta, es una sensación extraordinaria, aunque, al mismo tiempo sea una sensación un tanto improbable. Sentirse tan bien que no haga falta nada más, que haga dejar el vicio y un "quiero más", realmente muy aparte. Sí, es muy difícil encontrar lo que llevabas toda la vida buscando, es prácticamente imposible llegar al punto de que todo lo demás te sobra, que nada ni nadie podría bajarte de el embriagador estado que te lleva a saber que estas loco, que estás perdido, o, simplemente, que estás enamorado. Pero en el momento en el que lo dejas todo, en el que podrías apostar la vida por una sonrisa, en el momento en el que le das importancia a cada uno de los pequeños detalles que nos brinda el día a día, en el momento en el que eres más suyo que tuyo, en el que los te quiero se quedan cortos y los te amo siguen sin alcanzar al corazón, en ese preciado momento en el que te resumes en unas cuantas letras, en un nombre, en el momento en el que ya no sientes miedo al pensar en las cosas que se te escapan, en el que caminas por la calle aferrado de otros cinco dedos y no deseas nada más. En ese momento, te darás cuenta de lo cerca que estás de dejar de ser un "tú", para pasar a ser un "nosotros", te darás cuenta de que has perdido la cabeza, de que te han conquistado hasta empapar cada uno de tus huesos. Y, te encantará, sí, amarás sentirte casi como me siento yo; la persona realmente más afortunada que ha pisado, pisa, y pisará el suelo, por siempre.

viernes, 26 de agosto de 2011

Todos los días sale el sol.

Ahora es cuando pasa el tiempo, cuando nos paramos a pensar en todo eso del destino y de lo que ya lleva escrito toda la vida, recordamos a aquellos que nos fallaron o a los que nosotros herimos, a los que siguen con nosotros, a los que se han incorporado hace poco, a los que se han ido y nunca olvidaremos.
Puede que también anhelemos aquellas cosas que hoy no se nos permite hacer, y, sin duda sonreiremos al recordar esos miles de momentos que han conseguido robarte el aliento. Sí, así están las cosas, el mundo cambia, las personas cambian; hasta puede incluso que yo haya cambiado junto a todas las cosas que me rodean, pero nunca lo sabré hasta que sea demasiado tarde, hasta que ya no pueda dar marcha atrás y agarrar de nuevo mis lápices de colores, hasta que la rutina me embuelva y me destrulla lentamente. Mentiría si dijese que no me gusta la vida, porque, es más, me apasiona, y siempre ha sido a sí, recuerdo con una gran sonrisa en la cara cada uno de los días en los que corría hasta la puerta, pegaba fuertemente los pies al suelo, y hacía una marquita, para luego chillar por toda la casa lo grande que me estaba haciendo. También recuerdo lo orgullosa que me sentía cada vez que una de mis obras de arte eran expuestas en el frigo, o cuando me inventaba miles de vidas ideales y las representaba con mis muñecos; sí, esas de se enamoran y viven felices. Era, era todo un lujo, no preocuparse de nada, mancharse y disculparse con una risilla desdentada. Me hace gracia el tiempo, tan caprichoso, pero a la vez tan fiel, tan sabio...No podría estar más agradecida, la verdad. Es el año tras año el que me ha guiado a tomar este camino, a descubrir realmente quien soy, a reir sin pensar en los millones de errores que cometí y que tiempo después supe como arreglar. Es toda una vida la que me ha enseñado a ser feliz sin excusas, la que me ha enseñado a amar a quien se lo merecía, y a ignorar a aquellos que no, la que me ha enseñado a diferenciar lo bueno de lo malo, a saber todo lo que valgo, a ser dos ojos oscuros con hambre de caricias, a querer por encima de mí. A darme cuenta de que los amigos, se cuentan con los dedos de una mano, y a veces, quedan libres la mitad.

lunes, 15 de agosto de 2011

Ahora, ahora todo es aún mejor.

Y derrepente sentí el impulso de dejar mi mundo por tí, de dejame convencer, de confiar en un sentimiento que por aquellos momentos desconocía. Quise mirarte a los ojos, quise romper la barrera que nos podía separar, arremetí con fuerza contra todo aquel recuerdo triste que quedaba del pasado, y me dejé llevar. Resquebrajé el dolor en el momento que pude hundirme en tus labios, lloré de felicidad al poder verme reflejada en tus ojos. Sentí miedo, mucho miedo de pasar a ser un simple capricho, pero, conseguí abrirme paso, hacerme grande, agrupar valor. No me cansé nunca de luchar por tí, de decirte cuanto te quería, te sentí cerca una y otra vez, soñé cada noche contigo, cuando nos alejabamos, sufrí cada adiós, valoré cada te amo y aproveché cada beso. Te colaste tan adentro..., tan adentro que pudiste palpar con ambas manos mi corazón, te entregué mi vida, olvidé todo lo que era mi yo antes de tí. Me dí cuenta de que esto no tendría fin, que había perdido la cabeza, que no existía un yo sin un tú. Y te lo dije, te hice saber que lo eras todo para mí, viví los mejores días mi vida junto a tu sonrisa, sonriendo y amandote. Me hiciste mejor persona, llegué a perder todo aquel rastro malo de mí, comprendí de una vez, que había nacido para amarte, y ser correspondida..
Pero ahora, ahora todo es aún mejor.

viernes, 22 de julio de 2011

Te amo, te amo, y te vuelvo a amar.



Y, siempre me dijeron que lo perfecto no existía, que quedaba muy pero que muy lejos de la sencilla vida humana. Siempre, siempre hablando de que la gente nace con defectos, con malicia, con vicios, que en toda persona reluce una pizca de crueldad, que es algo tan natural como vivir, que es nuestra forma de ser, que nos crearon así, para bien o para mal. Años y años me hablaron sobre que enamorarse era una mera mentira, que solo desembocaba en el dolor, que el querer solo era una pantalla oscura que no permitía ver más allá de la realidad. Que el amor te dejaba, pudiendo hacer así, a lo más repugnante de este mundo, un ideal de belleza y comportamiento. Y, la verdad, pasé mucho tiempo creyendo que todos estos conceptos se basaban en historias reales, que así era la vida, que no existía el amor, ni lo perfecto, ni nada por lo que mereciese perder la cabeza. La verdad, doy gracias, más bien, le doy gracias a él, por colarse en mis días, y destruir todos los cimientos, de mis atolondrados pensamientos.

martes, 19 de julio de 2011

No son solo palabras, besos, abrazos y sentimientos, esto es mucho más. Es como si juntasemos todo lo que te ha consigo hacer sonreir a lo largo de tu vida, lo cocinasemos, lo batiesemos bien, lo perdiesemos y lo encontrasemos en las manos de una sola persona. Esto es una constante fuente de felicidad, es lo más bonito que se atrevió a pisar el planeta nunca, como si gracias a él mereciese la pena vivir. Sin dudarlo, es algo real, demasiado real y perfecto para que mi insulsa cabeza logre digerirlo, algo que siento de dentro y que a veces parece que me arrancan cuando no está aquí. Es como un sentimiento arrebatador de quererle acariciar. Y, es lo que tiene estar enamorada de unas perfectas cuatro letras y un acento que vuelve a jugarmelas en la palabra corazón. Porque sí, porque no soy yo si el no me besa, que es lo único que necesito para volver a ser la persona más afortunada que ha habido, hay, y está por haber. No quiero darme cuenta de que no se sabe lo que se tiene hasta que se pierde, porque, en estos momentos se perfectamente lo que tengo aquí, y, la verdad, esque apenas puedo dejar de sonreir, dejar de vivir, parar el mundo y ser triste. No, él ha hecho que no haya ni un solo espacio en todo este campo de batalla en el que quepa la tristeza, las lágrimas y el sentirse desdichado. Estos dos meses más que nunca siento la obligación de dar las gracias por cada sonrisa de las que me dedica, por sus ojos relampagueando cualquier día de los que está junto a mí, por cada uno de sus besos mañaneros que ya voy echando de menos, por todos los gestos que hace, por las tonterías que llega a soltar por esa boquita, por absolutamente todo. Que sin duda, le necesito aquí, que él me hace feliz, que mi vida ya va echándole de menos, que le necesito a dos centímetros de mi cuerpo, que todo me da igual si él me quiere.
¿Sabes qué? Te quiero.

jueves, 14 de julio de 2011

Y todo puede empezar ahora, en cierta manera. Sí, a eso me refiero, a disfrutar de cada milésima de segundo que pase en la que notes como el sol infiere positivamente sobre cada poro de tu piel. Me refiero a que me sonrías sin miedo cada vez que me veas, no importa ni el momento, ni la distancia a la que nos encontremos. Que, sé que en ese momento en el que pasamos a dejar tantas cosas atrás, ganamos algo de lo que jamás nos desaremos. Sí, vuela, corre, siente, muerde, derrapa, y sé tú, que, tenemos tres meses por delante para comernos a besos, sin importarnos el reloj, ni el sueño, ni los lunes a las ocho y media.

jueves, 9 de junio de 2011

Memorias de un alma perdida.


El día se estaba acabando, se notaba en cada una de las pupilas apesadumbradas que se apretaban en aquel lugar. Apenas en unas horas, podríamos dar nuestro sueño por acabado, alejandonos para siempre de aquello que tanta consternación había creado en nuestros corazones. Notaba como eran demasiadas cosas las que nos unian, y solo un par las que nos separaban, pero, con un profundo pesar en el pecho, que aún consigue resquebrajar mis sueños, tuve que admitir que en cierto modo, estos dos incombenientes hacían que todo aquello que deseaba quedase tan lejos de mis límites... En aquel momento no me quedaba más que disfrutar de ese instante, no más de una hora y media, y soñar conque algún día conseguiría vivir mi vida con la total libertad que había alcanzado y que me negaba a soltar. Pero, ¿de qué me servía pensar en eso? ¿De qué me servía martirizarme con algo que me quedaba tan lejano? Asentí interiormente a aquellas dos preguntas, sabiendo la respuesta a la perfección. Dejé que mi mirada revoloteara un poco más por mi alrededor, y, como no, no tuvieron mejor escusa que un trayecto rectilíneo para posarse sobre sus labios, sobre su pelo y sus ojos, sobre él. Me abatía la idea de tener que decir adiós, me dolía demasiado saber que le quería y que no podía hacer nada por acercarlo unos centímetros más a mi cuerpo. Pero, eso fue todo, me quedé quieta, pensando en lo que nos depararía el futuro, mirándonos en silencio y sintiéndo como el alma se me rompía en tiras. ¿Qué qué sentí? Dolor, sólo dolor, pero el dolor más bello que te puedes llegar a imaginar.

sábado, 21 de mayo de 2011

~21.05.2011.


Elegí que tu fueses la persona que llenase mis días de sonrisas, que me comieras a besos, también tu voz al otro lado del teléfono. Elegí llorar por ti de vez en cuando, elegí creerme tus verdades y creerme a medias tus mentiras. Elegí que no quería otros abrazos, ni otras manos deambulando por mi pelo. Elegí nuestro mes del año y nuestro día del mes, elegí que tú fueras mi locura y mi cordura. Elegí las idas y venidas, las despedidas, elegí la impotencia y la incertidumbre. Elegí el miedo a fallar y los impulsos, elegí las miradas, elegí temblar, elegí hacerme adicta a ti, a tus manías y a tu manera de hacer las cosas. Elegí conservar intacto cada momento, y dejar huella. Elegí arriesgar y jugármela por tí.

lunes, 16 de mayo de 2011

-Es un privilegio tener la bastante madurez como para volver a enamorarse.



Y todo ha pasado tan rápido, como en un abrir de ojos. Nuestros caminos se bifurcaron, llegaron a un punto en el que debías escoger una u otra carretera. Y nadie se esperaba que me alejase de ti, ni siquiera yo me creía capaz, pero, cada vez me fui uniendo más a su sonrisa, a sus chistes a las ocho y media de la mañana, a estar pegada a su olor cinco días a la semana.

jueves, 5 de mayo de 2011

Me parece increíble, precioso momento en el que de todas las personas del mundo, es solo él el que te regala las ganas de vivir. Nunca me creí capaz, pero, ante todo, nunca te creí capaz de hacerme feliz. Pero, así es, que tenían razón cuando me dijeron que después de un año de lluvias, siempre hay una mañana en la que sale el sol. ¿Sabes? No puedo ser la Reina de Inglaterra, pero puedo tratarte como mi auténtico principe.

lunes, 2 de mayo de 2011

¿Dónde meto mi vida?

Y esque cada vez que miro al pasado tengo demasiado claro que desde que propuse no quererle voy sin rumbo fijo, es triste, sí, muy triste la influencia que puede tener sobre tí una sola persona. Hasta tal punto de nublarte el mundo si no está ahí, y bien, con esto quiero decir que no comprendo la situación. ¿Se puede olvidar a una persona a la que realmente has amado, o siempre permanecerá ese brillo en tu corazón?
Creo que no tengo una meta en la vida desde que el no ocupa mi primer puesto en la lista de prioridades, ¿qué es lo que realmente deseo?

Nerea, mi mejor amiga.

                                                                                [ ]

♦Y la amistad, en cualquier caso, es lo que nos hace fuertes.

domingo, 1 de mayo de 2011

Yo sí.


Haz un esfuerzo y métete a fondo en la situación. Imagina que es de noche, una noche en la que un mísero supiro sonaría como el rugido de tres cañones. Y entonces me ves, y no puedo dominarme. Imagina que me acerco, que me aferro a tí, que nuestros rostros y cuerpos se sitúan uno frente al otro. Que estoy cerca, demasiado cerca para pensar con claridad. El espacio se va disipando tan rápido que el aliento se te hiela, los centímetros van menguando, siete, cinco, tres, dos centímetros de tus labios. Mis manos titubean un momento, pero suben despacio y apasionadamente por tu espalda, por tu cuello, mis dedos comienzan a enredarse en tu pelo, trazando cada bucle a la perfección. Imagina que tan sólo estamos tu y yo, solos, nadie a nuestro alrededor. Y yo te atraigo hacia mí, hacia mi cuerpo con un brutal gesto apasionado, y pasamos a medir las distancias en simples milímetros. A estas alturas ya deberías sentir mi respiración entrecortada contra tu cuello, ya deberías escuchar cómo te lo digo al oído. Imagina que quiero besarte lentamente, que quiero abrazarte para no soltarte jamás, que quiero tenerte, y que tengo unas ganas inmensas de que no te vayas, de que no me rechaces, de estar contigo, de tocarte, tenerte, sentirte cerca, mirarte y saber a través de tus ojos que esto es para siempre. De que me digas con la mirada lo que no somos capaces de expresar con las palabras. Tengo ganas de contarte, de enseñarte cosas que sólo a ti puedo confesarte. Imagina que quiero mostrarte esas cosas que nadie conoce, esas que solo tú puedes saber. Dime que harías.
-¿Has amado alguna vez a alguien hasta llegar a sentir que ya no existes? ¿Hasta el punto en el que ya no te importa lo que pase? ¿Hasta el punto en el que estar con él ya es suficiente, cuando te mira y tu corazón se detiene por un instante?

domingo, 24 de abril de 2011

Y poder darte un beso de buenas noches a cada segundo que pasase.


-Me gustaría, me gustaría de veras que fueses tú quien me tendiese la mano cuando tropiece con alguno de los baches de este duro camino llamado vida.
-Amí también me gusta soñar.


sábado, 23 de abril de 2011

Y ante todo, soy capaz de quererte como nadie.




No tengo un tipo espectacular, de ésos que los hombres no pueden evitar mirar. No domino el francés, ni siquiera el inglés, y en mi propia lengua hablo de por demás. No soy ordenada, ni me gustan los juegos de mesa. No soy la típica chica inteligente, ni la guapa, ni aquella que es simpática en demasía. Soy, simplemente, un espíritu inquieto, de ésos a los que les cuesta estar parados, que no son capaces de dejar de saltar, y correr, y brincar por donde quiera que van. Canto canciones todo el rato, cualquier momento es bueno para desprender alegría y contagiar un poco al mundo de algo que no sea la tóxica rutina de esas caras largas y monótonas, ya demasiado habituales. Soy torpe, despreocupada e histérica. Tengo muy poca paciencia, y a menudo digo cosas de las que debería arrepentirme. Sinceramente, creo que mis peores pesadillas han sido las que he tenido despierta, todas las cosas que en poco tiempo he podido ver, pero los mejores sueños también han sido aquellos en los cuales ni tan siquiera estaba dormida. Confieso que, en realidad, tengo una adicción un tanto descontrolada hacia todo lo prohibido, y me tienta demasiado lo inmoral. No soy capaz de entender por qué motivo me cuesta tanto olvidarte, ni porqué a ti te ha costado tan poco.
Pero, creo que al fin me voy haciendo a la idea de perderte. Bueno, no, a decir verdad, ya me he figurado que hace tiempo que te perdí.

Si me permites decir que me haces la mujer más feliz del mundo.

¿Con esto quieres decir que de veras has vuelto? ¿Que me juras que no te vas a volver a marchar nunca?




viernes, 22 de abril de 2011

♥.

-Desde que te fuistes, no me sale sonreir con la misma afán de siempre, y tampoco me despierto ya con esas ganas incontrolables de comerme el mundo nada más levantarme de la cama. No me sale ser muy listo, y he olvidado hasta como se hacía un huevo frito, paso las horas mirando por la ventana, porsi acaso tu coche rojo aparca en el otro lado de la acera, oliendo tus bestidos, mirando las fotos de nuestra boda, y, ante todo, llorando, llorando hasta quedarme dormido encima de tus cosas, de tus recuerdos a los que tanto echo de menos. Nunca me dí cuenta de que te necesitaba como al aire, siempre acostumbrastes a estar ahí, a besarme cuando nos encontramos después del trabajo, o cuando alguno de los dos sale de casa, a abrazarme cuando me sentía abatido por problemas del trabajo, familiares o de cualquier tipo, a colorear mis sueños con el aroma de tu perfume, a poder darme la vuelta y recorrerte la espalda. Es algo, que añoro tanto que cada despertar me quema en le pecho, vivir no es vivir desde que tu cabello oscuro se evaporó de mis días. Sabes que lo daría todo por volver a recorrer tus labios sabor canela, por verme reflejado en ese par de ojitos oscuros que tanto me han echo perder la cabeza.

por alguien que de veras, es muy especial.

Ella es ella, Carla Marín Gutiérrez, una personita muy retrasada que no cambio por nada en el mundo. Ella es quien ha estado ahí, desde el primer día, hasta el día de hoy, y, apenas dudo al decir, que es ella quien me acompañará hasta el resto de nuestros días. Han pasado ya catorce años, ciento sesenta y ocho meses, cuatro mil novecientos días desde que la conozco, y, puedo darme el gustazo al decir que en ninguno de esos casi cinco mil despertares, nunca me ha fallado, que jamás me ha puesto la zancadilla. Siempre, siempre habrá alguien que lo sepa todo de tí, desde tu primera papilla hasta tu último miedo, y, sin dudarlo, en mi vida es ella, mi melliza defectuosa, mi sonrisa mi todo. No hace falta decir que, estamos muy locas, que juntas somos imparables. ¿Cuantos miles de momentos? Imposible contarlos, ya que, seguramente, ni existe un número tan elevado: nuestros primeros viajes, vídeos, peleas, sonrisas, dientes, lloros, pasos, nuestro bautizo, nuestros cumpleaños, nuestro internado, aquel famoso tolón tolón, los bailes de punk, nuestras paridas, los mejungues, nuestros paseos por sanmillán o yagüe, las tardes en casa de la abuela, nuestros secretos más íntimos, las tardes cantando las canciones de grease por el telefono, todo, todo, todo, y absolutamente todo. Que, los buenos amigos cuentan tus historias más emocionantes, pero solo los mejores, las viven junto a tí.

martes, 22 de marzo de 2011

KEEP CALM AND DRINK VODKA.


-Hazme caso, vive muchos años, vive intésamente, bebe hoy hasta que desvaríes, comete todas aquellas locuras que de solo pensarlo, hacían que se estremeciera tu corazón, adopta las leyes y el dios que tú mismo establectas, atenta contra su corazón, sin compasión, sin callarte nada, sigue a tus impulsos, sube la música hasta que los tímpanos te exploten, pégate contra la pared y grita de puro placer, baila o besa apasionadamente debajo de la lluvia, fíate de tu sombra, miéntele a la mentira, y a la verdad también, sonríe hasta la saciedad, suda, ártate a batidos de plátano, respira de la forma más rara posible, aprende todo aquello que te pongan frente a la cara, enámorate y comete las estupideces que esto conlleva, ríete hasta que acabes vomitando, y enfrentate a la muerte una y otra vez, preferiblemente, a una distancia prudente, no pienses antes de actuar, porque no te servirá de nada, gritale al mundo que sientes cuando te toco, baila sin música hasta desfallecer, pierde las llaves de casa y que no te preocupe lo más mínimo, da vueltas hasta marearte y caer al suelo, gana todo aquello que esté en tu mano, haz el loco y vuelve cuando amanezca a casa, duerme en la playa cuando llegue el verano, comete errores y no te arrepientas, mete la pata y no te avergüences, no escondas los sentimientos, llora si así lo sientes, no sigas las modas si no es lo tuyo, lo finjas ser quien no eres, salta al vacío simpre con la verdad por delante, ólvidate de todo aquello que implique trabajo, recorta la palabra monotomía del diccionario, pero, ante todo, antes de cualquier cosa que se te pase por la cabeza, no me olvides, no me olvides nunca.

Cuando el espíritu es lo único que nos hace fuertes.


En estos momentos de la vida, en los que todo se para y te observa desde lejos, con una mirada hostil que refleja tanto odio como miedo, es cuando más ganas de vivir se quedan por el camino, cuando sonríes por simple educación, y das los buenos días cada vez que te levantas.

lunes, 21 de marzo de 2011

El amor está muerto.

Parece que todo se vuelve demasiado grande a mi alrededor 



ahora que necesito una esperanza para seguir, ahora que mi mundo se nubla y se vuelve del gris más tenebroso que jamás protagonizó mi vida, ahora que cada canción que escucho, habla de desamores y lágrimas, ahora que el lúgubre frío se cuela entre mis articulaciones, ahora que me esprime el corazón y lo unico que sale son lágrimas, ahora que simplemente necesito un ahora con el que contar, te vas, te escapas de mi vida, junto a mi sonrisa, te olvidas de mí en el andén izquierdo de la carretera.

domingo, 20 de marzo de 2011

Víctimas.

Y bien, hoy he jurado no quererte, no derretirme cuando cruzas la calle, no soñar con la luz de tu mirada, y, mucho menos, hacer de tú vida, el centro de la mía. La verdad, esque, en esta vida hay pasos difíciles, de esos que con solo pensarlos abruman tu mundo, y, esta decisión es uno de esos pasos, pero, ¿sabes? nos estoy arruinando la vida, mi corazón juega a ponermelas putas cuando intento cruzar, como buena ciudadana, por el paso de cebra.

sábado, 19 de marzo de 2011

Oh, podría haber sido perfecto, podría haberlo sido de otra manera


-Y vuelve a ser seis, vuelve a teñirse mi cielo del color del verano, a recordar cada letra, cada palabra, y cada frase que pudimos pronunciar en aquellos escasos meses, pero que apesar de serlo, se clavaron tan profundos en mi piel, que llegaron a acariciarme el corazón. Sabes que no miento, tampoco escondo mis sentimientos bajo siete llaves, como aconstumbraba a hacer, es inútil, no sirve de nada camuflar que te necesito para vivir, y, perdona ser así, perdón por haberme enamorado como nunca lo hice de tí, de tu sonrisa y de tu forma de pensar. Perdoname cada error, y cada palabra que me debería haber callado, las veces que te dije que te quería y nos separamos un poco, de verdad que siento hacerte pasar por esto. Pero, ante todo, gracias por darme tu cariño, por portarte bien cuando menos me lo merecía, por ser tan genial, por tener esa esencia que solo tú tienes y me hace desvariar. Porque, jo pequeño, me es difícil borrar tus tequieros de ese estropeado trasto loco llamado corazón, nunca he amado a nadie como lo he hecho contigo, y, reiteradamente suelo preguntarme si de aquí a un tiempo lo volveré ha hacer. No quiero perderte, no quiero que esta amistad se hunda en el lodo por mis pequeñas meteduras de pata, por mi mente loca y retorcida que quiere verme muerta de amor, sabes que no sobreviría si tú no fueses la primera persona que supiese lo que me pasa, porque, ante todo, antes de quererte y morir por tí, eres mi amigo, mi mejor amigo, y, eso vale por mil de mis amores, por cada lágrima y cada te quiero, por quererte así de tanto, y por mirarte de reojo, te quiero, pero eso no supera nuestra amistad, porfavor, no te alejes.

(todo lo que quiero es imposible)



sábado, 29 de enero de 2011

Te quiero.

Y nunca supe la razón exacta por la cual pasan las cosas, pero al parecer, simplemente ocurren, sin dar porqués. Haciendo de aquello en lo que apenas te fijabas, lo más absolutamente importante y necesario del mundo, sin lo que te es imposible sobrevivir. Que poco a poco te has vuelto a colar en mi vida, sin avisar, apareció tu sonrisa en un despertar cualquiera, haciéndome tan feliz, como lo soy ahora.

martes, 4 de enero de 2011

Su aliento contrastaba con la tristeza aquel día, haciendo la vida, un poco mejor.

"Deletreé cada una de las palabras de aquella última frase que había dejado escrita en uno de esos posits cuadrados de color amarillo, que permanecía pegado a mi mesa. Examiné a fondo cada frase, su caligrafía, el pequeño temblor que se podía observar en el trazado de cada una de sus letras. Debo admitir, que me enamoré de esas frases sin sentido en las que explicaba que me quería, me encamoré completamente de su forma de escribir, de sus tes y sus pes, pero sobre todo de sus qus y de sus erres. Me enamoré, por segunda vez, porque, tal y como conoce el mundo, siempre fué él, el primero en mi lista de deseos, siempre estuvo en primer lugar en mi carta a Papa Noel. Pasé los dedos indice y meñique por encima de aquella superficie plana, evocando aquellos labios dulces con olor a canela, o, simplemente, recordando su mirada cuando penetraba en mi interior. Siempre, me dijeron que esto del amor era algo que lni as palabras no llegaban a someter, algo verdaderamente perro de expresar, pero ligero de sentir. Como aquel primer paso, o aquella primera carcajada, mi primer beso, y con este, mi primer él."